Cómo convertir tu bicicleta normal en una eléctrica

Transforma tu bicicleta en eléctrica

Cada vez más personas buscáis alternativas más sostenibles y prácticas para moveros por la ciudad o por la montaña y disfrutar de recorridos más largos sin tanto esfuerzo físico. Si estás aquí, probablemente hayas considerado convertir tu bicicleta convencional en una eléctrica para disfrutar de sus ventajas. 

Antes de hacerlo, es importante que entiendas qué necesitarás, cuáles son los pasos a seguir y, sobre todo, qué esperar de una bicicleta transformada en comparación con una eléctrica diseñada desde cero.

Materiales necesarios para convertir tu bicicleta en eléctrica

Transformar una bicicleta convencional en eléctrica requiere varios componentes esenciales. Aquí te dejamos una lista básica para que tengas una idea clara:

  • Motor eléctrico:
    Este es el componente principal de la conversión y determina en gran medida el rendimiento de tu bicicleta eléctrica. Puedes elegir entre tres tipos de motores, según tus necesidades y el diseño de tu bicicleta:

    • Motor de buje delantero: Se instala en la rueda delantera. Es más fácil de montar y adecuado para terrenos planos.
    • Motor de buje trasero: Ofrece una mejor tracción y estabilidad, especialmente en terrenos irregulares.
    • Motor de eje central: Se monta en el pedalier y proporciona una asistencia más natural y eficiente, aunque su instalación es más compleja.
  • Batería:
    La batería es la fuente de energía de tu bicicleta eléctrica. Es importante elegir una batería de litio de calidad, ya que afecta directamente la autonomía y el rendimiento. Ten en cuenta lo siguiente:

    • Capacidad: Medida en vatios-hora (Wh), define cuánta energía puede almacenar. A mayor capacidad, mayor autonomía.
    • Ubicación: Algunas baterías se montan en el cuadro, otras en el portaequipajes o incluso en la tija del sillín.
    • Compatibilidad: Asegúrate de que sea compatible con el motor que elijas.
  • Controlador:
    Este dispositivo actúa como el cerebro del sistema, regulando la potencia del motor y distribuyendo la energía desde la batería. Debe ser compatible con el motor y la batería para garantizar un funcionamiento correcto.

  • Sensor de pedaleo (PAS):
    Este sensor detecta el movimiento de los pedales y activa el motor automáticamente para asistirte mientras pedaleas. Algunos sistemas más avanzados también incluyen sensores de torque, que ajustan la potencia del motor según la fuerza que aplicas al pedal.

  • Pantalla o controlador de mando:
    Una pequeña pantalla montada en el manillar te permitirá controlar y personalizar el funcionamiento de tu bicicleta eléctrica. Con ella podrás:

    • Elegir el nivel de asistencia al pedaleo.
    • Consultar la velocidad.
    • Ver el estado de la batería.
  • Cables y conexiones:
    Estos componentes son fundamentales para conectar el motor, la batería, el controlador y otros accesorios. Asegúrate de que los cables sean resistentes y estén bien protegidos para evitar problemas de desgaste o cortocircuitos.

  • Accesorios opcionales:
    Algunos kits incluyen elementos adicionales que mejoran la experiencia:

    • Frenos con corte eléctrico: Detienen el motor en cuanto accionas los frenos, garantizando mayor seguridad.
    • Acelerador: Permite activar el motor sin necesidad de pedalear, aunque puede estar restringido por normativas locales.
  • Herramientas específicas:
    Además de un kit básico de herramientas para bicicletas (llaves Allen, destornilladores, etc.), podrías necesitar herramientas adicionales para instalar el motor o ajustar los componentes eléctricos, como extractores de bielas o llaves especiales para el pedalier.

Ten en cuenta que la calidad de estos componentes es crucial para garantizar un buen rendimiento y seguridad.

Pasos para convertir tu bicicleta en eléctrica

  1. Elige un kit de conversión adecuado: Existen kits en el mercado que vienen con todos los componentes necesarios. Investiga cuál es compatible con tu tipo de bicicleta y el uso que le darás.
  2. Instala el motor: Dependiendo del tipo de motor que elijas, esto implicará colocar el sistema en la rueda delantera, trasera o en el eje central. Asegúrate de seguir las instrucciones del fabricante.
  3. Coloca la batería: Instálala en el cuadro, en el portaequipajes o en la zona diseñada para ella, según las especificaciones del kit.
  4. Conecta el controlador: Une todos los cables del motor, la batería y la pantalla al controlador. Verifica que las conexiones sean firmes y seguras.
  5. Instala el sensor de pedaleo: Colócalo en el pedalier para que el sistema reconozca cuándo estás pedaleando.
  6. Prueba el sistema: Antes de salir a la carretera, realiza pruebas en un lugar seguro para asegurarte de que todo funcione correctamente.

Este proceso requiere algo de habilidad técnica, paciencia y tiempo. Además, siempre es recomendable contar con ayuda profesional si encuentras dificultades.

Limitaciones de transformar tu bicicleta

Aunque convertir una bicicleta normal en eléctrica puede parecer una opción económica y creativa, es importante considerar las limitaciones:

  1. Compatibilidad de componentes: No todos los cuadros ni sistemas de freno están diseñados para soportar los motores eléctricos o baterías, lo que puede comprometer la seguridad.
  2. Peso adicional: Los componentes eléctricos, especialmente el motor y la batería, añaden peso considerable, lo que puede afectar la maniobrabilidad y estabilidad de la bicicleta.
  3. Mantenimiento complejo: Al tratarse de una conversión artesanal, el mantenimiento puede ser más complicado, ya que no todos los talleres están familiarizados con estos sistemas personalizados.
  4. Rendimiento limitado: Las bicicletas transformadas no suelen igualar el rendimiento de una bicicleta eléctrica diseñada profesionalmente, especialmente en términos de autonomía, potencia y durabilidad.
  5. Aspecto estético: La integración de los componentes eléctricos puede resultar poco estética, dejando cables expuestos o baterías mal ajustadas.

¿Por qué una bicicleta eléctrica nueva es la mejor opción?

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